Las vacaciones no deben ser un tiempo perdido, ni un paréntesis en nuestro camino de maduración humana. Por eso te ofrecemos los siguientes consejos:
1- Dios nunca se toma vacaciones respecto a ti, por lo tanto tú no deberías en relación a Él. Por lo mismo te invitamos a llevarlo contigo durante este tiempo. Sin importar donde estés, haz un esfuerzo y encuentra una iglesia, un minuto de silencio y reflexión. En esta misma guía incluimos algunos datos de parroquias de la costa.
2- No trates de hacer todo lo que no hiciste durante todo el año en esos pocos días. Escoge pocas cosas, trata de hacerlas con alegría y con las personas que quieres para que puedas aprovechar de verdad este tiempo.
3- Las relaciones familiares tampoco se toman vacaciones. Aprovecha de dedicarle tiempo a la familia, también a las personas que de verdad importan en tu vida. Disfruta con cada uno de ellos.
4- Aprovecha el tiempo de cultivar la mente con buena lectura con algunos de estos libros recomendados por el Padre Javier Santa María y el Padre Aitor Bilbao:
«Benedicto XVI, una vida», Peter Seewald.
«De aquí a aquí. Doce umbrales en el camino espiritual», Javier Melloni.
«Biografía del silencio», Pablo d’Ors
«De retiro con Henri Nouwen. Las grandes preguntas de una vida cautivante», Chris Pritchett y Marjorie J. Thompson.
«Psicoterapia de Dios. La fe con resiliencia», Boris Cyrulnik.
«El discernimiento. Cómo leer los signos de la vida diaria», Henri J. M. Nouwen.
«Madurez, sentido y cristianismo», Antonio Ávila Blanco.
«Volver a Jesús», José Antonio Pagola.
«Esta es nuestra fe. Teología para quienes no leen teología», Luis González-Carvajal.
«Letra pequeña. La cotidianidad infinita», Benjamín González Buelta.