Una celebración inolvidable en Talagante
La fiesta de Corpus Christi en Talagante se convirtió en una de las celebraciones más importantes, ya que reúne a toda la comunidad en un evento lleno de fe y alegría. Este día memorable marcó un hito especial, pues después de 39 años, las campanas del campanario volvieron a sonar. Durante la festividad, se bendijo la primera etapa de la construcción del tan anhelado campanario, símbolo vivo de nuestra fe y un constante llamado a la oración y acción.
“Hace casi 40 años se cayó la torre del campanario y dejaron de sonar sus campanas. En esta fiesta de Corpus Christi, quisimos tener la bendición de la primera etapa de la construcción del tan anhelado campanario como un símbolo vivo de la fe y un llamado constante a la oración y a la acción”, expresó Susana Vargas, una de las organizadoras del evento.
En este significativo día, se celebró la presencia real de Cristo, no sólo como comunidad parroquial, sino también junto a todo el pueblo de Talagante. En el contexto del bicentenario de la parroquia, estuvieron presentes autoridades como la Delegada presidencial, el Alcalde, el Consejo en pleno, Carabineros, PDI, Bomberos, directores de colegios, comerciantes, familias de la catequesis y jóvenes, todos unidos en una vibrante celebración.
Organización y preparativos
La organización de esta gran fiesta requirió de mucho tiempo y esfuerzo de toda la comunidad y autoridades, quienes en conjunto ofrecieron algo hermoso al Señor. Susana contó: “Toda esta fiesta fue organizada con mucho tiempo, teniendo reuniones de apoyo con la municipalidad, Carabineros, Delegación Provincial, agentes pastorales, Bomberos, todos unidos para realizar algo hermoso para el Señor”.
Una de las actividades más destacadas fue la creación de una alfombra gigante alrededor de la plaza de armas, hecha con aserrín teñido y decorada con esténciles. Este proyecto involucró a jóvenes de colegios y grupos pastorales que, con dedicación, prepararon las alfombras para la procesión del Señor Sacramentado.
Ceremonia y Misa
Susana Vargas, nos entregó más detalles de la ceremonia civil “se llevó a cabo en el exterior, mientras que la misa se celebró dentro del templo. Ambas fueron dirigidas por niños que ya habían hecho su Primera Comunión y formaban parte del equipo de liturgia, un orgullo para nuestra parroquia y un testimonio del trabajo del Padre Gustavo con la catequesis”.
Además, en el marco del bicentenario de la parroquia, se le hizo entrega a los colegios de la Virgen Peregrina. Algunos de ellos fueron: colegio Carampangue, Los Ceibos, Niño Jesús, Sagrado Corazón y el Instituto Premilitar. La Virgen recorrerá colegios, instituciones y familias de la comuna, para fortalecer la fe y unidad.
Homenajes y renovación de compromisos
La celebración fue presidida por nuestro Obispo Cristián Contreras Villarroel. Además, los ministros extraordinarios de la comunión renovaron su compromiso, reafirmando su dedicación al servicio de la comunidad.
Un momento emotivo fue el homenaje de los bomberos a la Virgen María, colocando una corona de flores en la parte más alta del campanario. Susana Vargas explica: “Este es un gesto simbólico, tiene raíces profundas, ya que históricamente los bomberos de Talagante han estado vinculados con la parroquia y sus campanas, que en sus inicios servían para los llamados a incendio antes de tener sirenas”.
La Fiesta de Corpus Christi fue más que una celebración, fue una manifestación viva de fe y unidad como pueblo. Bajo el lema «Talagante, un pueblo para Cristo», este evento refuerza la identidad e impulsa a seguir creciendo juntos en la fe y el servicio a nuestra comunidad.