Una iniciativa impulsada por laicos para reducir las listas de espera en la atención médica.
Desde octubre de 2022, la comuna de Santo Domingo ha sido testigo de una destacada iniciativa para mejorar el acceso a las especialidades médicas. Este Operativo Piloto de Especialidades Médicas, impulsado por un grupo de médicos y coordinado por el doctor Jaime Arriagada, ha permitido atender a más de 1.877 pacientes en un esfuerzo por reducir las listas de espera y brindar una atención médica de calidad. Este operativo, actualmente en curso y con miras a expandirse por otros dos años a partir de octubre de 2024, es un claro ejemplo de cómo la colaboración entre laicos y profesionales de la salud puede transformar la calidad de vida en la comunidad.
El desafío de las listas de espera
El contexto que dio origen a esta iniciativa fue la creciente lista de espera para consultas de especialidades médicas. A nivel nacional, a mediados de 2024, alrededor de 2.5 millones de pacientes esperaban atención, con tiempos de espera promedio de hasta 400 días para consultas y 659 días para cirugías no GES (Garantías Explícitas en Salud).
En el caso de Santo Domingo, aproximadamente 3.000 pacientes estaban en espera de atención especializada, una cifra alarmante para una comuna de poco más de 10.000 habitantes.
Este operativo surgió con el objetivo de atender a la población FONASA en el CESFAM local y ha involucrado a un equipo de 19 médicos especialistas, que incluyen cardiólogos, traumatólogos, urólogos y pediatras, entre otros. Las atenciones se realizan un sábado al mes, permitiendo un promedio mensual de 77 consultas. Aunque la proyección inicial era atender a 500 pacientes al año, el operativo ha superado esta cifra gracias al compromiso de sus organizadores y a la gran demanda existente.
Un modelo de solidaridad y compromiso comunitario
El Operativo Piloto de Especialidades Médicas es un esfuerzo impulsado por la participación activa de la comunidad laica en la respuesta a una necesidad de salud pública. Con el apoyo de médicos y especialistas que se desplazan voluntariamente, el proyecto no solo ha atendido a cientos de pacientes, sino que también ha demostrado el valor del trabajo conjunto entre la comunidad y los profesionales de la salud.
Los organizadores han proyectado una extensión de esta iniciativa por dos años más, de octubre de 2024 a septiembre de 2026. Además, planean incrementar el número de operativos mensuales y establecer alianzas con el nuevo Hospital de San Antonio, con el fin de fortalecer las capacidades de atención en la región. Este plan busca hacer frente a la creciente demanda de atención, que ha sido impulsada en parte por el aumento de la población en la provincia de San Antonio tras la pandemia.
La solidaridad como motor del proyecto
El doctor Arriagada, coordinador del operativo, destaca que este proyecto surgió de una “inquietud solidaria” en respuesta a las marcadas inequidades en el acceso a la salud. “Consideramos que hay una inequidad enorme en la atención de salud entre la gente que tiene medios y posibilidades y quienes están en el sistema público, que no tiene esas posibilidades”, explica. Esta visión de justicia social ha sido una motivación clave para Arriagada y sus colegas, quienes se han comprometido a brindar una atención médica especializada a quienes más lo necesitan en Santo Domingo.
Arriagada, quien ha residido por años en Santo Domingo, describe la comuna como “un lugar muy especial, una comunidad pequeña donde todos se conocen”. Para él, esta cercanía con la comunidad ha sido fundamental para el desarrollo del proyecto. “Es realmente una asociación de amistad muy marcada que no se ve en las comunas de Santiago”, agrega, subrayando cómo este ambiente de apoyo mutuo ha sido una de las razones por las que decidió iniciar esta labor comunitaria.
Atención integral y acompañamiento continuo
El operativo tiene una característica que lo distingue de otros proyectos similares: el seguimiento integral de los pacientes. Según el doctor Arriagada, el objetivo no es solo atender consultas médicas puntuales, sino brindar un acompañamiento continuo para garantizar la solución de problemas de salud específicos. “Tratamos de seguir a los pacientes; por ejemplo, si alguien tiene una duda diagnóstica que requiere cirugía, hacemos contacto con el hospital de San Antonio para agilizar el proceso”, explica. Este compromiso de “seguir a los pacientes en su camino” se ha convertido en uno de los aspectos más valorados del operativo.
Además, Arriagada resalta la importancia de contar con un equipo de especialistas comprometidos, que han dedicado su tiempo para realizar consultas y procedimientos de forma regular en Santo Domingo. Al respecto, destaca: “Hemos agregado a radiólogos jóvenes del hospital de San Antonio que hacen ecografías con un ecógrafo de alta resolución. Esto nos ha permitido ofrecer diagnósticos más precisos y efectivos a los pacientes”. La dedicación de estos médicos ha sido fundamental para el éxito del proyecto, y como comenta el doctor, muchos de ellos se han unido de manera voluntaria, movidos por el interés en contribuir a la comunidad.
Un impacto en la comunidad y en la salud pública
El impacto positivo de este operativo se ha sentido no solo entre los pacientes, sino también en el personal de salud que colabora en el proyecto. Según el doctor Arriagada, la directora de salud local, Camila Bertrand, ha expresado cómo esta iniciativa le ha renovado la fe en que la salud pública puede ser mejor. “Camila nos comentó que esta actividad le ha mejorado la esperanza y la fe en que la salud pública podía ser mejor de lo que era”, comparte Arriagada, enfatizando que este tipo de iniciativas no solo mejoran la calidad de vida de los pacientes, sino que también inspiran y motivan a los trabajadores de salud a seguir esforzándose.
El operativo no solo ha sido un “regalo de Dios” para el doctor Arriagada, quien recuerda con gratitud sus inicios como médico en una pequeña comunidad en Constitución, sino que también ha creado una red de solidaridad entre los médicos participantes, muchos de los cuales ahora pasan más tiempo en Santo Domingo gracias a su participación en el proyecto. “Aquellos doctores que participan con nosotros hoy en día van mucho más a Santo Domingo; es un incentivo para ellos y para la comunidad”, concluye Arriagada, reflejando el espíritu de entrega que impulsa esta iniciativa de salud comunitaria.
Proyecciones a futuro: Capacitación y expansión
Dada la magnitud de las listas de espera y la falta de especialistas en el sistema público, el operativo busca expandirse y continuar por otros dos años a partir de octubre de 2024. Además, se han propuesto capacitar a médicos de atención primaria en el manejo de patologías comunes para mejorar la eficiencia del sistema de salud a largo plazo. Esta estrategia apunta a reducir las derivaciones y optimizar los recursos disponibles, lo cual es vital para enfrentar los desafíos en una región con una alta demanda post-pandemia.
El Operativo Piloto de Especialidades Médicas en Santo Domingo es una iniciativa que destaca no solo por sus logros en salud, sino también como un modelo de solidaridad y compromiso social. A través de la cooperación entre profesionales de salud y laicos, el proyecto ha demostrado que es posible construir un sistema de atención más justo, accesible y humano.
