El pasado 19 de agosto, en el Auditorio del Duoc UC sede Melipilla, se realizó el Primer Encuentro Económico Diocesano.
Con la presencia del obispo, don Cristián Contreras, este encuentro marca el inicio de una mayor apertura y transparencia en el buen uso de los recursos, y también el de visibilizar las áreas de trabajo del obispado. Al encuentro fueron invitadas alrededor de 170 personas, entre ellas el Obispo, todos los sacerdotes; los directores de las fundaciones sostenedoras de los colegios; directores de Cáritas, de la Fundación Fe y Solidaridad (FESOL) y Edured; consejeros económicos que asesoran al Obispo; todos los consejeros administrativos de las distintas parroquias, y más los funcionarios del Obispado.
Según explicó Julio Feres, Administrador de bienes del Obispado de Melipilla, el fin de este primer encuentro fue mostrar lo importante que es la gestión administrativa y económica, y el sentido pastoral que se encuentra en ella. “Así como existen otras áreas en cada parroquia y comunidad que realizan diferentes apostolados, el ámbito económico también debe ser considerado como una pastoral que realiza una labor muy importante de respaldo y sustento por el bien de la misión evangelizadora”, explicó.
Este primer paso nos encamina como diócesis para realizar una cuenta pública en mayo de 2024, con la finalidad de que los feligreses puedan conocer el manejo económico y administrativo de la diócesis y así apoyar la labor apostólica de la Iglesia a través de sus obras de caridad, educacionales, y las menos visibles que son las pastorales de migrantes, adulto mayor y catequesis. “Quisimos de alguna manera, a través de los números, reflejar el desafío que tiene el Obispado de Melipilla para el futuro, el cual es cumplir su labor pastoral y evangelizadora en toda la diócesis ocupando para ellos todos los medios que tiene a su alcance (parroquias, capillas, colegios, jardines y obras de caridad)”, destacó Julio.
Entre los principales desafíos propuestos se encuentran el financiamiento, los cementerios, la contabilidad y la comunicación. A su vez se hizo un repaso del organigrama de las principales áreas que conforman la diócesis a fin de poder conocernos mejor y mejorar la coordinación. Respecto al Estado de Resultado consolidado a 2022 se informó un déficit de cerca de 110 millones de pesos que también será un desafío que abordar.
En la ocasión se ofrecieron distintos testimonios como el de la pastoral social, jardines, colegios, pastoral religiosa, hogares y consejo económico, con el fin de presentar su visión, objetivos, qué es lo que hacen, qué necesitan, y los desafíos que tienen para los próximos años.
Para concluir, se realizó una presentación especial sobre los Consejos de Administración Parroquial, sus tareas, responsabilidades y desafíos: “Como receptores de donaciones, administradores de recursos públicos y también como generadores de ingresos propios, buscamos ser un actor comprometido con la transparencia y el buen uso de los recursos”, puntualizó Julio Feres.
“Lo que estamos iniciando con este encuentro, es un completo proceso de revisión de nuestros procederes a fin de poder estar seguros de que no estamos en falta, de que estamos cumpliendo con la sociedad a través de un buen actuar, ante el Estado en cualquiera de los ámbitos que nos corresponda y también frente a la comunidad en cuanto al buen uso de los recursos que nos han confiado”, finalizó.
