En el contexto de los trágicos sucesos que se han vivido los últimos días en el centro y sur del país, principalmente en zonas de las regiones de Ñuble, Biobío y La Araucanía, la pastoral juvenil de la diócesis de San José de Melipilla en comunión con la Arquidiócesis de la Santísima Concepción se organizaron para salir en ayuda de los damnificados.
Durante los días 5, 6 y 7 de febrero, jóvenes de la comunidad peregrinos de Asís de la parroquia San Francisco de Asís de El Monte, se unieron en favor de nuestros hermanos afectados por los incendios.
Para lograr su objetivo, dos jóvenes realizaron un simple intercambio de mensajes por whatsapp, para luego dar paso a una gran organización con toda la pastoral juvenil unida a otras pastorales, capillas e instituciones como la I.Municipalidad de El Monte y algunas iglesias evangélicas. Así lograron organizar un centro de acopio parroquial que funcionó de manera ininterrumpida durante los tres días, seleccionando, clasificando y ordenando todo lo que llegaba.
En esta maravillosa cruzada lograron reunir más de 300 kilos de arroz, azúcar y fideos, además de cerca de 1.000 litros de agua, bebidas isotónicas y pañales para todas las edades; más de 300 cepillos de dientes y la misma cantidad en pastas dentales; jabones y shampoo, toallas femeninas y papel higiénico. Junto con ello la municipalidad hizo una donación de casi 400 juguetes junto a medicamentos, mascarillas, gotas para los ojos, entre otros.
Lo reunido fue enviado directamente a las parroquias Inmaculada Concepción en la localidad de Santa Juana, y a la parroquia San José de Arauco; ambas comunidades ubicadas en la región del Biobío y que se vieron afectadas por los incendios forestales.
Quienes viajaron en representación de todo el grupo de jóvenes fueron Aileen Alday, coordinadora de la actividad y Juan Bustos, voluntario de la misma parroquia San Francisco de Asís de El Monte. En Concepción los recibió -en Casa Betania- el vicario pastoral, padre César Pedreros y la delegada episcopal de la arquidiócesis junto con jóvenes para descargar el camión. Luego, en Santa Juana, se reunieron con el padre Ricardo Valencia, quien es el párroco de la Inmaculada Concepción de Santa Juana, parroquia que perdió dos capillas, para entregarle todo lo que llevaron junto con un presente espiritual consistente en escapularios, rosarios e imágenes de piedad de la Virgen del Carmen, de parte de monseñor Cristián Contreras Villarroel, obispo de Melipilla, y una carta dirigida al párroco.
“Desde el encuentro nacional de pastoral juvenil resuena mucho en mi cabeza aquella frase de Jesús donde dice les he enseñado esto para que hagan lo mismo con los otros. Dentro de todos los días de voluntariado recibiendo donaciones, gente de distintos credos, creyentes, no creyentes, que se acercaron a nosotros, la frase que más repetí fue que Dios nos ama a todos por igual. Él nos dio el primer ejemplo de ayudarse y ser comunidad”, afirmó Aileen Alday, coordinadora de la actividad de la diócesis de San José de Melipilla.
